viernes, 21 de noviembre de 2014

Capítulo 18: Clases de guitarra

"Clack". Cerrada, así no podría escapar de aquí hasta que volviera a abrir la puerta... Podríamos hablar tranquilamente hasta que mis padres o mi hermana subieran a mi casa, aunque cruzaba los dedos por que eso fuera más tarde que pronto.

Atenea estaba eufórica, daba saltitos mientras buscaba mi habitación, aunque la costaría un poco encontrarla. Aparte de que era pequeña, estaba un poco escondida.

-¡Esperame!- dije riendo cuando empezó a corretear por el salón.

Rió conmigo y paró un segundo.

La guié hasta mi habitación tranquilamente y la dejé allí para ir a por unas bebidas.

<<Tranquilizate Carlos, piensa, no te aceleres.>> Me decía para mí.

~*~

Me guió hasta su habitación y fue a por algo para beber.
- Siento el desorden.
- No importa- negué mirando los posters de las paredes y los libros.
- Aún me faltan algunas cosas para terminar de ordenar todo.
-¡Si quieres te ayudo!- dice sin pensarlo.
-¡Genial! Entre los dos terminaremos pronto.

Dejó la bandeja con las bebidas sobre su escritorio y abrió el armario de donde sacó la guitarra en su respectiva funda. Cuando la sacó, observé que la caja estaba pintada con unos dibujos de color negro iguales a los que estaban dibujados en la funda en dorado.

-Qué bonita... -susurré.

Tomó asiento en su silla de escritorio y sacó de la funda el afinador de la guitarra. Conectó el aparato y pulsó las cuerdas regulándolas con las clavijas hasta que comenzó a sonar bien.

Tocó un par de acordes para comprobarlo mientras yo miraba embobada sus manos y subí la mirada hacia su sonrisa.

~*~

Carraspeé un poco, tenía las clases de guitarra un poco oxidadas, pero al menos recordaba lo básico.

Saqué la púa y sonreí.

-Espero que te guste...

Empecé a tocar muy despacio (todo lo tranquilo que podía estar en aquel momento, claro) y canté con tanto sentimiento como pude ""Wherever you are" de ONE OK ROCK.

La sensación era increíble. Sentía como la música nos envolvía a ambos llevándonos a otro mundo.

Pero cuando la canción terminó, sentí ese vacío interno. Ya habíamos bajado de las nubes y tocado con los pies el suelo.

Observé su expresión. Sonreía, tenía los ojos cristalinos y las mejillas algo sonrojadas.

- No ha sido para tanto, no llores... -acaricié despacio su mejilla.

-N-no estoy llorando- rió nerviosa y se pasó el dorso de la mano por los ojos-, es solo que es mi canción favorita y lo has hecho genial...

Ahora fui yo el que reí nervioso y me pasé la mano por el pelo.

- No exageres, además hace mucho que no tocaba. La guitarra estaba incluso desafinada.

Negó.

-De verdad, lo haces muy bien.
-¿Quieres que te enseñe a tocar la canción entonces?

~*~

Asentí y le hice sitio junto a mí. Colocó con cuidado la guitarra sobre mis piernas y puso mis manos en su sitio para sujetarla bien.

- Veamos... la púa se coge así.

Cogió mi mano y colocó la púa entre mis dedos. Se acercó más a mi hasta que pude sentir su respiración.

-Comencemos con la clase.

[[CONTINUARÁ ;)]]

No hay comentarios:

Publicar un comentario